Conoce Havoc®, la gama rodenticida Syngenta con registro pecuario
Los roedores constituyen una de las plagas más importantes en instalaciones avícolas y porcinas, entre otras, debido a que son animales que se adaptan fácilmente a una gran cantidad de escenarios y las instalaciones pecuarias facilitan la presencia y colonización por ratas y ratones. Son plagas de importancia zoosanitaria que afectan la productividad e inocuidad alimentaria, además de ser altamente destructivas para las estructuras, cableado, incluso para la cimentación de las instalaciones.
Existen más de 2,500 especies de roedores y son de gran importancia ecológica, pero algunas especies cuya evolución les facilitó la adaptación exitosa como plagas, son causa de graves daños sanitarios y económicos en las unidades de producción pecuaria. Al menos 50 diversos patógenos causales de enfermedades de importancia pecuaria y zoonosis están vinculados a los roedores plagas, ya que ratas y ratones comensales pueden ser vectores biológicos o vectores mecánicos de diversos virus, bacterias, parásitos y hongos. Los roedores consumen el 10% de su peso al día y contaminan entre 5 a 10 veces la cantidad que comen, lo que afecta el índice de conversión alimenticia en parvadas y ganado de diferentes especies.
Las instalaciones pecuarias requieren estrategias y métodos de Manejo Integrado de Roedores (MIR) que logren con rapidez manejar de manera eficiente las infestaciones de ratas y ratones, uno de los métodos importantes en el MIR es el control químico con cebos rodenticidas.
Syngenta ha desarrollado una gama de rodenticidas específicos para el control químico de roedores en instalaciones pecuarias: Havoc®, con dos presentaciones para diferentes situaciones y necesidades: pellets y bloques. A veces es necesario colocar estratégicamente el cebo dentro de las madrigueras, además de complementar con su colocación en cebaderos en rutas activas y perímetro de las instalaciones y los límites de la granja.
¿Qué es Havoc®?
Havoc® la gama rodenticida de Syngenta para uso pecuario en México, en dos formulaciones, pellets y bloques a base de Brodifacoum, el anticoagulante de segunda generación más potente, desarrolladas con la mezcla de finos cereales para alta atractividad y palatabilidad para el control ratas de alcantarillas (Rattus norvegicus), ratas del tejado (Rattus rattus) y ratones domésticos (Mus musculus).
Los rodenticidas anticoagulantes interfieren con el mecanismo de la coagulación en los roedores y Havoc® supera la potencia rodenticida de otros anticoagulantes de primera y segunda generación. Havoc® coadyuva al blindaje sanitario en programas de bioseguridad controlando eficaz y eficientemente roedores, logrando mejores resultados con menos esfuerzo.
Havoc® bloques y Havoc® pellet tienen registro COFEPRIS de uso pecuario y por su eficacia comprobada son de primera elección para el manejo de la resistencia a otros anticoagulantes, haciendo rentable el programa de Manejo Integrado de Roedores.
El margen de seguridad para especies no objeto de control es amplio, debido a que las formulaciones Havoc® contienen Bitrex®, un potente amargante con efecto emético para evitar el consumo por personas y a que las dosis letales para roedores y otras especies animales son distintas. Adicionalmente la vitamina K1 (fitomenadiona) es el antídoto específico.
Importancia del manejo integrado de roedores
El Manejo Integrado de Roedores (MIR) es esencial dentro de las buenas prácticas de producción pecuaria, para cumplir con los requisitos de bioseguridad y para coadyuvar al cumplimiento de los parámetros productivos y de rentabilidad del negocio.
El MIR evita la transmisión de enfermedades asociadas a roedores en la parvada o hato, la contaminación de alimentos con patógenos, las pérdidas económicas estructurales y las pérdidas por “robo” de alimento por las voraces colonias de roedores.
Los roedores son también vectores importantes de zoonosis que afectan a los humanos, como la Salmonelosis, Colibacilosis, Leptospirosis, Tifo murino, entre otras, que no solo ponen en riesgo a los trabajadores de las granjas, como riesgo laboral, también a la población por la pérdida de la inocuidad de los alimentos. Los decomisos por fallas de inocuidad en cárnicos, huevo y leche implican serios problemas legales, multas y pérdidas de rentabilidad para las empresas pecuarias.
El MIR oportuno y estratégico evita los daños sanitarios y económicos por detrimento a las instalaciones que causan los roedores, por lo cual es importante la detección de roedores checando en la inspección la presencia de estos signos de infestación, su abundancia y mapear áreas en que se localizan:
- Heces frescas y viejas
- Manchas y olores de orina
- Roeduras y materiales dañados
- Manchas de grasa corporal en muros, vigas, puertas
- Senderos o rutas activas
- Madrigueras de rata, nidos de ratón que estén activos o inactivos
- Huellas de las patas y colas de los roedores
- Avistamientos de roedores por la noche y durante el día.
- Avistamiento de cadáveres
¿Qué hacer para controlar roedores en granjas porcinas y avícolas?
Previamente a las visitas de inspección es muy importante conocer estos puntos básicos del MIR:
- Inspección: identificar en un mapa o croquis las áreas dónde se localiza una mayor infestación de roedores, los signos de la infestación, así como la ubicación de los puntos de cebado donde se han aplicado rodenticidas. Estos datos se deben actualizar semana a semana en base al monitoreo establecido en un cronograma de actividades.
- Control Cultural-Sanidad: detectar posibles puntos de acceso o refugio de la plaga y evitar la existencia de alimentos, desechos orgánicos y cadáveres en áreas periféricas o externas de las instalaciones que propician que la plaga se sienta atraída e invada las instalaciones. Al menos el 50% del éxito en el MIR se logra con buenas prácticas de higiene en las instalaciones. También es preciso tener orden sistemático en los almacenes de alimento para los animales, buena organización de estibas.
- Control Físico-Trampas: establecer un cerco de trampeo en las áreas con mayor infestación y actividad de roedores. Estas deben colocarse primeramente en lugares cercanos a madrigueras o rutas con más actividad, cuidando siempre que se coloquen lejos de sitios donde podría haber riesgos para animales de producción o personal de la unidad de producción pecuaria. Las trampas de golpe y las de captura múltiple suelen ser las más utilizadas en el ámbito pecuario.
- Control Químico- el uso de cebos rodenticidas de Syngenta: colocar los puntos de cebado de manera estratégica y las dosis indicadas en las etiquetas de los productos Havoc®. Para colocarlos utilice cajas de cebadero o tramos de tubo de PVC. En caso de una alta infestación utilice dosis alta y aplicar con mayor frecuencia. Aplique en áreas interiores o en áreas exteriores, en donde no exista riesgo para los animales de producción, alrededor de edificaciones, almacenes y oficinas. En interiores se recomienda aplicar cuidadosamente en el periodo de vacío sanitario y recolectar el cebo no consumido antes del ingreso de la nueva parvada de pollos o piara de engorda, en instalaciones de gallinas de postura en jaula, es posible mantener los cebaderos en interiores, en puntos estratégicos.
- Monitoreo y documentación: Combinando los métodos anteriores se logra acelerar el control de las poblaciones de roedores y es muy importante documentarlo, realizar un cronograma de actividades correspondientes y llevar una estadística como parte de las Buenas Prácticas de Producción Pecuaria.
Dosis recomendadas de los rodenticidas Syngenta
Conozca las dosis recomendadas Havoc® para el control de ratas y ratones en instalaciones pecuarias.
Es importante que para establecer correctamente la cantidad de puntos de cebado y frecuencia de re-cebado, se realice previamente la estimación de la abundancia poblacional, ya que al inicio de una infestación alta se recomienda re-cebar 4 días después del primer cebado y posteriormente puede ampliarse a cada 7 días hasta la desaparición de signos.
*Punto de cebado: colocar la cantidad de cebo dentro de cebaderos herméticos en un rango de 2 a 30 m de distancia, dependiendo del protocolo de gestión de calidad que aplique en el tipo de unidad de producción pecuaria. Los rangos de 5 a 10 m para ratas y 2 a 5 m para ratones son frecuentemente utilizados.
Havoc®, eficacia que protege su unidad de producción de los roedores
Línea especializada de productos con registro pecuario de Syngenta, rodenticidas avalados por nuestra experiencia a nivel mundial en el control de roedores, formulaciones diseñadas para lograr la suculencia precisa para obtener altos niveles de consumo por ratas y ratones, aunado al ingrediente activo, el Brodifacoum, la más potente superwarfarina de segunda generación que existe en el mundo.
Los rodenticidas Havoc® combinan gran palatabilidad y poder mortal contra ratas y ratones, con una sola ingesta basta, logrando resultados con menos producto y menor esfuerzo. Una rata adulta requiere tan solo consumir 2.5 gramos de nuestro rodenticida, mientras que una rata joven se intoxica con 1.3 gramos y un ratón con 0.2 gramos, lo que se traduce en alto rendimiento y rentabilidad en un control de roedores.
Por ser Havoc la gama de rodenticidas más potentes comparados con otros productos en el mercado, superan a otros. Por ejemplo 1 kilogramo de Havoc® a base del Brodifacoum de Syngenta en pellets o en bloques logra lo que 2.5 kg de difetialona y los 5 kg de rodenticidas a base de Bromadiolona.
Con Havoc®: menor desperdicio, menor número de visitas de recebado, mayor control, mayor rentabilidad y mejora en la productividad e inocuidad.
¡Havoc® es su aliado en los escenarios de infestaciones más complejos y desafiantes! Consulte a nuestra área técnica y a los distribuidores Farm Pest Control autorizados de Syngenta.
Autor: M.MVZ. Ma. Teresa de J. Ambriz B. / Technical Support Manager LAN Professional Solutions/ Syngenta.